💔🔥 ¡Impactante revelación! Elvis Presley explica las razones por las que nunca llegó al altar con Ann-Margret. La confesión reaviva uno de los romances más legendarios de Hollywood.

El romance entre Elvis Presley y Ann-Margret fue uno de los más apasionados y comentados de los años 60 en Hollywood. La química entre ambos se hizo evidente durante el rodaje de la película Viva Las Vegas (1964), donde su complicidad traspasó la pantalla. Los rumores sobre un inminente matrimonio eran tan fuertes que muchos daban por hecho que Ann-Margret sería la esposa del Rey del Rock.

Sin embargo, aquello nunca ocurrió. Años después, tanto Ann-Margret como allegados de Elvis revelaron los motivos, y el propio cantante habría admitido en confianza la verdadera razón de esa ruptura: su lealtad a Priscilla Beaulieu.

La confesión de Elvis

Elvis reconoció que amaba profundamente a Ann-Margret, pero se encontraba comprometido emocionalmente con Priscilla, con quien mantenía una relación desde su adolescencia. “No podía traicionar el compromiso que ya tenía, aunque mi corazón me dijera otra cosa”, habría confesado el cantante a personas cercanas.

Según Ann-Margret, la conexión entre ellos era “como un espejo”, pero ambos entendieron que Elvis estaba destinado a casarse con Priscilla.

La presión del entorno

Además de sus sentimientos encontrados, Elvis enfrentaba una presión enorme por parte de su manager, el Coronel Tom Parker, quien veía en Ann-Margret un riesgo para la imagen pública del cantante. El Coronel insistía en que Elvis debía mantener una vida personal controlada y que un matrimonio con Ann-Margret podía desviar el rumbo de su carrera.

Un amor que nunca murió

Aunque nunca se casaron, Elvis y Ann-Margret mantuvieron una amistad cercana hasta la muerte del cantante en 1977. Ella fue una de las pocas estrellas que asistió al funeral de Graceland, y más tarde confesó:
—“Nuestro amor fue verdadero, pero también imposible. Siempre lo llevaré en mi corazón.”

El legado de una historia imposible

Hoy, la confesión de Elvis sobre por qué no se casó con Ann-Margret no hace más que alimentar la leyenda de un amor que, aunque no terminó en altar, quedó inmortalizado en canciones, películas y en la memoria de los fans.