✨ Entre velas, arreglos florales deslumbrantes y un escenario de ensueño, Brooklyn y Nicola Peltz Beckham volvieron a decir “sí” en una mágica renovación de votos. El evento combinó tradición y modernidad, dejando a sus invitados —y a sus millones de fans— fascinados por cada uno de sus románticos detalles.

En un entorno de ensueño y bajo una puesta de sol dorada, Brooklyn y Nicola Peltz Beckham volvieron a prometerse amor eterno. La renovación de votos, realizada apenas un año después de su fastuosa boda, reunió glamour, emoción y un despliegue de detalles cuidadosamente seleccionados.

El escenario perfecto

La celebración tuvo lugar en una lujosa villa frente al mar, en la costa italiana, con vistas panorámicas al Mediterráneo. Los jardines, rebosantes de rosas blancas y orquídeas, creaban un pasillo natural que conducía a un altar minimalista, decorado con velas altas y cortinas de lino ondeando al viento.

—Queríamos que todo se sintiera íntimo, pero con un toque mágico —comentó Nicola—. Italia tiene un encanto especial que nos conquistó.

La llegada de los novios

Brooklyn llegó con un traje de lino blanco de corte impecable, mientras que Nicola deslumbró con un vestido hecho a medida por una reconocida casa de moda francesa. El diseño, elegante y etéreo, presentaba un escote delicado, espalda descubierta y una falda fluida que parecía flotar con cada paso.

En lugar del tradicional ramo, Nicola llevó un pequeño arreglo de peonías y lavanda, simbolizando amor y tranquilidad.

La ceremonia

La ceremonia fue oficiada por un amigo cercano de la pareja, lo que le dio un aire personal y auténtico. Los votos, escritos por ambos, fueron el momento más emotivo de la noche. Brooklyn, con voz temblorosa, recordó la primera vez que vio a Nicola y cómo “su vida cambió para siempre”.

Nicola, por su parte, habló de las aventuras, desafíos y risas que habían compartido:
—Si algo he aprendido este año, es que el verdadero lujo es construir una vida contigo.

Detalles exclusivos

Cada invitado recibió un cuaderno con la portada bordada con sus iniciales, para que pudieran anotar sus pensamientos y deseos para la pareja. También había estaciones de caligrafía en vivo, donde artistas escribían frases personalizadas para los asistentes.

La música corrió a cargo de una banda de jazz y un cuarteto de cuerdas que interpretó versiones románticas de canciones clásicas y modernas.

La recepción

Después de la ceremonia, los invitados pasaron a una terraza iluminada por guirnaldas de luces y lámparas colgantes. El banquete, diseñado por un chef con estrella Michelin, incluyó platos inspirados en la cocina italiana: pasta fresca rellena de trufa, lubina al horno y un postre de limón y almendra que rindió homenaje a la costa amalfitana.

El pastel, de cuatro pisos, estaba cubierto de flores comestibles y decorado con tonos blancos y dorados.

Invitados y moda

Entre los asistentes destacaron familiares cercanos, amigos íntimos y algunas figuras del mundo del arte y la música. La moda fue otro de los grandes protagonistas: vestidos vaporosos, trajes de lino y accesorios artesanales dominaron la noche.

Un fotógrafo oficial capturó imágenes en blanco y negro que, según la pareja, formarán parte de un álbum privado, pero algunas se compartieron en redes sociales con mensajes llenos de cariño y admiración.

El baile y la sorpresa final

La pareja inauguró la pista con una versión acústica de su canción favorita, interpretada por un invitado sorpresa: un cantautor británico amigo de la familia.

A medianoche, se lanzaron fuegos artificiales sobre el mar, iluminando la costa y dejando a todos boquiabiertos. Brooklyn y Nicola, tomados de la mano, observaron en silencio, como si ese momento fuera solo suyo.

Más allá de la celebración

Esta renovación de votos no solo reafirmó su compromiso, sino que mostró su intención de seguir construyendo una vida juntos, rodeados de amor, arte y detalles significativos.

En palabras de Brooklyn:
—Hoy no es solo una celebración de nuestro amor, sino de la familia y los amigos que nos apoyan.

Nicola añadió:
—Lo más importante es que seguimos soñando juntos.

Conclusión

La noche terminó con risas, música y la promesa de nuevos capítulos por escribir. La renovación de votos de Brooklyn y Nicola Peltz Beckham fue mucho más que un evento lujoso: fue una declaración pública e íntima de que, a pesar del brillo y la fama, su prioridad sigue siendo la misma… amarse cada día como si fuera el primero.